El 10 de enero de 2007 el Comandante Eterno Hugo Chávez juró ante la Asamblea Nacional para ejercer como Presidente de la República, para el periodo 2007-2013.
Esta juramentación tuvo mucho significado, primero, porque se trataba de un juramento del presidente electo con mayor número de votos en la historia de Venezuela, y segundo, porque Chávez juró frente a la primera mujer presidenta del parlamento venezolano, la abogada Cilia Flores.
Acompañado por una multitud que inundó las calles de la Capital, el presidente Chávez llegó al hemiciclo protocolar donde se llevó a cabo el acto de rigor, donde se desarrolló una cátedra que afirmaba los pasos para construir una patria socialista.
El plan de gobierno de Chávez, en conjunto con las metas que quería cumplir con su nuevo mandato, fueron los protagonistas de su discurso. Ese mismo día, dio a conocer las reformas que se realizarían durante su gestión, haciendo hincapié en que no se dejarían de lado, la contraloría y el seguimiento de avance de los trabajos iniciados.
Chávez dejó clara la necesidad de encontrar puntos para conectar el diálogo entre los diferentes sectores políticos de la Nación, reafirmando aún más su visión democrática e incluyente. Instó a la derecha a que respetaran la voluntad y lo que decidió el pueblo venezolano.
“Yo vuelvo a hacer un llamado a Venezuela toda, a los sectores conscientes de la vida nacional para que, respetándonos, reconociéndonos en nuestras diferencias, en nuestros enfoques, asumamos la decisión de la mayoría, regla de oro si queremos una democracia y si creemos en una democracia, porque ahora andan algunos diciendo que la democracia debe respetar a las minorías. Sí, pero es que ellos detrás de eso están escondiendo el irrespeto a la voluntad de las mayorías” enfatizó en su discurso para cerrar.
MinFinanzas/GP
