Los mejores recuerdos de José Enrique Sulvaran son de las afueras del museo de Bellas Artes en Caracas, ahí realizaba artesanía y la vendía a modestos precios.
Con el tiempo decidió emprender y montar una Boutique. Aunque en ese momento (hace 10 años) no se le daba tanto valor a los emprendimientos, existía la figura de las cooperativas, por lo que José montó una familiar con sus hermanas Ana María y Zulay Sulvaran.
Ese emprendimiento familiar lleva por nombre Dejavu Stilos y está ubicado en el Centro Comercial Miranda en Los Teques.
Este emprendedor destaca que el apoyo que le ha dado el Estado venezolano a los emprendedores ha sido fundamental para el desarrollo de los proyectos. “quienes vivíamos en el anonimato ahora somos visibles. Es necesario el apoyo más allá del financiamiento para salir adelante”, dice.
Se trata de una tienda que además de vender artesanía, es un espacio para compartir. José lo denomina cariñosamente “una casita de regalos”.
José aprendió la artesanía empíricamente y con los años se ha perfeccionado.
“Hacía velas, collares, decoraciones, ahora hacemos ropa, accesorios, bisutería, botellas, tejidos, franelas, fuentes, lámparas. Lo artesanal tiene más valor porque se hace con las manos, con mucho cariño y creatividad”, dijo este emprendedor.
Además de vender estas prendas, José presta los espacios para que otros emprendedores muestren sus productos.
“Nunca imaginé tener un espacio para vender mis cosas. Mi sueño es que este concepto se multiplique ya que emprender solo no tiene sentido, la intensión es que ese emprendimiento se multiplique”, dice.
A José y a sus hermanas pueden contactarlos a través de @dejavuestilos. Finalmente, José asegura que hay que tener confianza en cada proyecto que se vaya a emprender y darle valor para alcanzar la prosperidad.
Redacción: Emprender Juntos