MPPEF (8.11.2019).- El consumismo es un fenómeno económico y social que se ha desarrollado como consecuencia de los diversos modelos de producción y consumo implementado por el capitalismo y reforzados por la publicidad.
A diario somos bombardeados por infinidad de publicidad que despiertan nuestras emociones e influyen mucho en el deseo de consumir o adquirir bienes y servicios sin relevancia.
En esta época, el consumismo va enfocado en los adelantos tecnológicos que cada vez son más frecuentes. Este es una de las aristas que promueve más la producción y uso de bienes que no son estrictamente necesarios.
El consumo viene dado por patrones de necesidades diferentes. Y está asociado, por ejemplo, a los costos que representa la destrucción del ambiente. Además de eso está la falta de cultura de reciclaje y reutilización, ocasionando que las personas desechen frecuentemente objetos a los que se les puede dar un Segundo uso o puedan ser remanufacturados.
La sociedad de consumo
La sociedad asume que necesita lo que compra en la medida en que los comerciantes y empresarios la convencen de que el producto en cuestión los va a ayudar a ser más felices y a vivir mejor.
Este tipo de sociedad está basada en el consumo constante y ofrece a las personas la posibilidad de adquirir bienes y servicios cada vez más diversificados.
Tal como lo expresó el Presidente Hugo Chávez, en una oportunidad, “Las relaciones de consumos están marcadas por el consumismo y también la explotación al consumidor (usuario), y la generación de necesidades ficticias”.
Igualmente señalaba que se tenía que definir bien cuáles eran las verdaderas necesidades de una sociedad para satisfacerlas y no caer en el consumismo.
Es así como se define que la sociedad se expresa a través del consumo. No solo para cubrir una necesidad, sino también para obtener el reconocimiento social.
En definitiva, se puede afirmar que el fenómeno del consumismo depende cada vez más del deseo que de la necesidad.
T/Dayana Valladares
