«Nada faculta a Guyana a coartar el derecho del pueblo venezolano a establecer libremente su condición política ni a intervenir en sus asuntos internos», así lo señaló la vicepresidenta Ejecutiva de la República Bolivariana de Venezuela, Delcy Rodríguez, ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), ante la posición infundadas de Guyana de solicitar medidas provisionales ante esta instancia, para evitar la realización del Referéndum Consultivo pautado para el próximo 3 de diciembre.
En ese orden de ideas, le recordó al país suramericano el artículo 2 de la Carta de Naciones Unidas, al citar: «Ninguna disposición de esta Carta autoriza a las Naciones Unidas a intervenir en los asuntos que son esencialmente de la justificación interna de los Estados ni obligará a los miembros a someter dichos asuntos a procedimientos de arreglo conforme a la presente Carta».
Rodríguez mencionó de igual forma, que de acuerdo con la Resolución 2131 de la Asamblea General de Naciones Unidas, ningún Estado tiene derecho de intervenir directa o indirectamente, y sea cual fuere el motivo, en los asuntos internos o externos de cualquier otro. Por lo tanto, no solamente la intervención armada, sino también cualesquiera otras formas de injerencia o de amenaza atentatoria de la personalidad del Estado, o de los elementos políticos, económicos y culturales que lo constituyen, están condenadas.
Apuntó que todo Estado debe respetar el derecho de libre determinación e independencia de los pueblos y naciones, el cual ha de ejercerse sin trabas ni presiones extrañas y con absoluto respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales. «Además, la participación en los asuntos públicos a través del referéndum es un derecho humano de cada uno de los venezolanos. Este derecho está reconocido y protegido, tanto por nuestra Constitución, como por el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos», agregó.
Asimismo, la Vicepresidenta Ejecutiva aseveró que no hay motivo alguno que pueda siquiera justificar la injerencia en los asuntos internos de Venezuela e impedir que el pueblo sea consultado en su conjunto y como individuo. «Es un exabrupto que se pretenda sustituir la voluntad popular de un país a través de inauditas medidas provisionales. Sería un caso único en la historia de esta Corte y del mundo», resaltó.
Venezuela en total apego a su integridad territorial
Por otro lado, la vicepresidenta Rodríguez afirmó que Venezuela ha sido siempre respetuosa del Acuerdo de Ginebra y del derecho internacional. «Esta posición está reflejada en cada una de las preguntas del referéndum. Esto es lo que nos diferencia de la conducta infractora y desviada de Guyana».
En segundo lugar, Venezuela tiene un sólido sistema institucional que vela por la constitucionalidad y legalidad de la actuación de los poderes públicos, por ello expresa su posición en contra de la jurisdicción obligatoria automática de la CIJ, mostrando así su coherencia en este respecto.
«Por esta razón, Venezuela forma parte de los 119 países que no han realizado lo previsto en el artículo 36.2 del Estatuto de la Corte. Al igual que países como Estados Unidos de América y la propia República Cooperativa de Guyana», dijo.
Recalcó que la postura histórica de Venezuela está expresamente contenida en el Acuerdo de Ginebra de 1966, que no reconoce la sede jurisdiccional como la vía amistosa para el logro de una solución práctica y satisfactoria para ambas partes.
A su vez, expresó que Venezuela rechaza firmemente las afirmaciones emitidas el día de ayer (14 de noviembre), que en burda e infantil manipulación, Guyana pretende estigmatizar esta tradición histórica y doctrina jurídica que en nada representa una situación excepcional y es compartida por la mayoría de la comunidad internacional. «Venimos hoy ante esta Corte para defender la independencia, la soberanía y la autodeterminación como derechos irrenunciables de nuestra nación», destacó Delcy Rodríguez.
Apuntó que Venezuela está ante la CIJ, porque Guyana no sólo ha decidido abandonar y violentar el Acuerdo de Ginebra, sino que ahora pretende transgredir el orden internacional y promover un cambio del sistema político venezolano con una acción intervencionista y temeraria que procura instrumentalizar la corte contra Venezuela, que es una clara línea de acción de colonialismo judicial.
«Por ende, Venezuela, basada en la Carta de las Naciones Unidas y del Estatuto de esta Corte, reafirma su categórico rechazo a la acción temeraria de Guyana, que busca inmiscuirse en sus asuntos internos. Nada evitará la realización del Referéndum previsto para el 3 de diciembre», exclamó Delcy Rodríguez en su intervención ante la audiencia de la CIJ.
Prensa: Vicepresidencia
